Al abrir me encontre con la ultima persona que jamas pudiera pensar que em encontraria.
“ Hola” dijo Chase, al otro lado del el marco de la puerta.
“ Uh, Hola”
Silencio.
“Vine porque..” “Que haces..” dijimos hablando uno sobre el otro. “ Tu primero” dije.
“ Ok, si. Bueno vine porque escuche sobre el accidente y quería saber si todo estaba bien”
“No, no. Nada esta bien la mama de Liz, ella…..murió” dije con lagrimas en mis ojos.
“ Oh, lo siento mucho”
“Si, si” dije en un suspiro. EL no podía sentir eso de verdad, el ni conoce a Liz, y mucho menos a su mama! Dios! Sabia que el solo quería ser condescendiente, pero mi racionalidad hacia el mundo estaba muy débil en ese momento.
“ Hay algo que pueda hacer?”
“ Uhm, si de hecho te agradecería si te fueras. La verdad es que es un momento muy difícil para Liz y no creo quiera a alguien que no conoce aquí”
Algo paso por su cara, pero desapareció tan rápido como apareció, no dejándome reconocer lo que fue.
“Si claro entiendo. Solo quería saber si estabas bien, ya veo que estas en buena compañía” dijo viendo sobre mi hombro.
Se dio la media vuelta y luego dudo y so voltio de nuevo hacia mi.
“Te veré mañana en el colegio?”
“Si” dije poniendo la mejor sonrisa que pude. Estaba exhausta después de todas la cosas que pasaron en el día.
Se dio la vuelta otra vez y camino en la oscuridad hasta su carro. Cerré la puerta y regrese al sofá, me senté al lado de Jake, y abrasé mis piernas con mis brazos apretándolas contra mi estomago.
“ Quien era?”
“Chase” dije sin mirar hacia arriba, estaba estudiando el diseño de la alfombra, tratando de entender porque Chase vendría a la casa de Liz.
Mas tarde esa noche hice un caldo y todos sentados en el sofá tomamos y nos calentamos, nada mejor para el alma q una sopa de pollo. Esa noche me la pase despierta tratando de entender porque cosas como esas podrían pasar a personas que solo merecen lo mejor y también tratando de entender porque Chase aparecería después de solo un día de haber medio hablado en el colegio, en casa de Liz. Y lo mas extraño era q no había ninguna manera de que el supiera donde Liz vivía.